Acuerdo PSC-ERC en Cataluña: solidaridad, singularidad y estabilidad
Parece obvio decir que en España tenemos un Estado de las autonomías, establecido como un principio constitucional en el artículo segundo de la Constitución. El independentismo catalán expresó su oposición rotunda al Estado de las Comunidades Autónomas en el llamado procés, que tuvo su momento álgido en el referéndum y la declaración de independencia de 2017. Sabemos el recorrido fallido que ha tenido esa alternativa al Estado autonómico. Tanto desde la acción judicial contra los líderes del procés, como en las recientes elecciones autónomicas en Cataluña, en las que los partidos independentistas perdieron la capacidad de formar gobierno y uno de ellos, ERC, ha apoyado un Ejecutivo encabezado por el líder del socialismo catalán.
Base política del pacto PSC-ERC: Solidaridad
El principio de solidaridad entre las nacionalidades y regiones, es decir, entre las Comunidades Autónomas, está reconocido y garantizado por la Constitución, según afirma con absoluta claridad su artículo segundo. El acuerdo PSC-ERC no tiene reticencias a ese principio. Lo dice con palabras directas y sin doble sentido: La aportación a la solidaridad debe ser explícita y debe reflejarse de forma transparente.
Base política del pacto PSC-ERC: Singularidad
Este elemento es seguramente el más destacado como base política del acuerdo entre el Partit dels Socialistes de Catalunya y Esquerra Republicana de Catalunya. Se trata de avanzar hacia un modelo tributario federal. De ahí que en el acuerdo ocupe un lugar principal lo que llama financiación singular de la Generalitat de Cataluña.
Base política del pacto PSC-ERC: Estabilidad
Si algo ha caracterizado el escenario político catalán en la última década ha sido la inestabilidad. Las consecuencias económicas han sido negativas y han terminado por crear una fuerte crisis política, que ahora se intenta encauzar. El acuerdo económico y financiero entre PSC y ERC no resistirá si no va acompañado de estabilidad política y seguridad jurídica.
Por esa razón, el acuerdo ambicioso entre partidos tan diferentes —y discrepantes— como PSC y ERC ha de cuidar la estabilidad política, de su economía y de su orden jurídico. Solo así se conseguirá el cambio de escenario que se desea hacia lo que el acuerdo llama Cataluña verde, próspera, justa, de derechos y feminista.
Diego López Garrido es director de la Fundación Alternativas y catedrático emérito de Derecho Constitucional (UCLM).
Resumen de la noticia
– Se destaca la importancia del Estado de las autonomías en España, establecido en la Constitución.
– El acuerdo entre PSC y ERC en Cataluña se basa en los principios de solidaridad, singularidad y estabilidad.
– Se enfatiza la solidaridad entre las Comunidades Autónomas y la necesidad de contribuir de manera transparente.
– Se propone un modelo tributario federal en el que la Generalitat de Cataluña gestionaría todos los impuestos.
– Se hace hincapié en la importancia de la estabilidad política y jurídica para el éxito del acuerdo.