mayo 20, 2024
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El futuro del Nuevo Mestalla se encuentra estancado en Valencia

El Nuevo Mestalla parece más estancado que nunca, especialmente después de la reunión del grupo de portavoces celebrada este jueves en Valencia, en la que se ha sometido a debate la aprobación de las fichas urbanísticas -el documento que establece los derechos y obligaciones del club para mudarse de campo-. El PP se queda solo en su intención por convencer a su socio de gobierno, Vox, que mantiene su postura de a Lim ni agua, ni tampoco a los partidos ahora en la oposición -PSPV y Compromís- que son los que redactaron esas fichas hace un año cuando estaban al frente de la corporación municipal.

Las repercusiones de no aprobar las fichas urbanísticas antes del 3 de agosto

Si se llegara a esta fecha sin que se hayan aprobado las fichas urbanísticas, se volvería a la situación que diseñaba la ATE (la figura jurídica que establecía los beneficios urbanísticos para el promotor del nuevo estadio -el club-) en 2015. Pero habría consecuencias aún peores. Si se llega a esta fecha sin acuerdo, lo normal es que ya hayan empezado a volar las opciones de que Valencia se presente como sede del Mundial 2030. El club no va a firmar su adhesión al protocolo FIFA mientras no tenga atado el convenio que le permitirá construir el nuevo estadio y aunque la RFEF quiere aguantar a Valencia hasta el final, esta prórroga será limitada.

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En una tarde de posturas encontradas y frases altisonantes, la sentencia más gruesa ha salido de la boca de Juan Giner, concejal de Urbanismo: Las fichas que ponemos encima de la mesa no permitirían al club disfrutar de los beneficios urbanísticos hasta que tuviera acabado el Nuevo Mestalla, es el momento de someterlas a pleno a votación. Al resto de los partidos, cuando gobernaban les parecían bien y ahora quieren enredar. Si no tenemos la garantía de que vaya a salir, no las podemos llevar al pleno. Si no llegamos a un acuerdo, Lim tendrá barra libre a partir del 3 de agosto.

La salida de los portavoces de la reunión ha dejado claro que las posturas están muy distanciadas. Borja Sanjuán, del PSPV, ha calificado la reunión de decepcionante y ha reiterado que la postura de su grupo político es fichas, convenio urbanístico y avales para garantizar que una vez que empiezan las obras no se paralizan ya más. La alcaldesa quiere darle a Lim un estadio que sea una estafa Papi Robles, de Compromís, ha sido muy dura al referirse a la alcaldesa -que no ha estado en la reunión- como cobarde y que muestra una incompetencia total. Y ha añadido: No nos ha presentado ninguna documentación.

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Por su parte, Juanma Badenas, de Vox, decía que era la primera vez que veía las fichas urbanísticas y que no iba a votar a favor de las fichas porque eso sería otorgar beneficios a un incumplidor.

Con toda esta información más o menos conocida aunque no de primera mano, según se ha excusado, el director corporativo del Valencia, Javier Solá no entiende la falta de acuerdo entre los políticos. No me puedo imaginar que los políticos de esta ciudad no sean capaces de ponerse de acuerdo antes del 3 de agosto. Sería un fracaso para la ciudad en primer lugar y en segundo lugar dejar pasar un Mundial, insistió.

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Sobre la opción de contar con Mestalla como sede del Mundial aseguró que la predisposición del club es tener el estadio por el bien del club y después para tener un estadio mundialista. También descartó un aval de Peter Lim al ser un proyecto del Valencia, que es quien se quedará con el estadio, será el titular y tendrá que pagarlo.

Resumen de la noticia

– El proyecto del Nuevo Mestalla está estancado, ya que la aprobación de las fichas urbanísticas ha sido sometida a debate en Valencia.
– El PP intenta convencer a su socio de gobierno, Vox, para aprobar las fichas, pero este se opone.
– Si las fichas no se aprueban antes del 3 de agosto, el Valencia tendr los beneficios urbanísticos sin obligaciones, como construir un polideportivo.
– La falta de acuerdo entre los partidos políticos pone en riesgo la posibilidad de que Valencia sea sede del Mundial 2030.
– El director corporativo del Valencia insta a llegar a un acuerdo antes del 3 de agosto para evitar consecuencias negativas para la ciudad y el club.

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